La iniciativa, que al cierre de esta edición esperaba ser convertida en ley por la Cámara baja, recibió el respaldo de los dirigentes cooperativos a lo largo de su camino parlamentario, iniciado en el despacho del senador mendocino Julio Cobos y que finalizó con el consenso de la mayoría de los bloques.
El diputado Eduardo Amadeo (Cambiemos) reconoció que el movimiento cooperativo «tiene una vida enorme y está presente con obras en todos lados, ha sido eficiente, honesto y ha cumplido con las expectativas», por lo que auguró que con este sistema de ahorro «va a haber una herramienta más en la que se podrá acudir a los bancos, que van a poder a su vez trabajar con las cooperativas para que construyan y movilicen también a sus asociados para que tomen las hipotecas».
Su colega del FPV Edgardo Depetri consideró que esta «es una herramienta más» que podrán usar las cooperativas aunque planteó algunas disidencias en tanto la herramienta como tal «está acotada a sectores con mayor capacidad económica».
«Hay que proteger a los que ingresen a las UVI para que la tasa de interés no esté por encima del acuerdo salarial y contener una posible quiebra del tomador del crédito. »
Depetri agregó que «las cooperativas deben ser convocadas a discutir políticas públicas que fortalezcan la construcción por esfuerzo propio, porque tienen una gran experiencia y ha demostrado eficiencia desde lo social, más allá de la eficacia entendida como rentabilidad financiera».
«Somos una herramienta»
Carlos Mansilla, miembro del Consejo de Administración de Cooperar, expuso la posición del sector en relación al déficit habitacional en el marco del primer debate sobre el proyecto Casa de Ahorro con los diputados nacionales y sus asesores.
Acompañado por Raúl López y Rodolfo Tolosa, también integrantes de la comisión de vivienda de la Confederación, sostuvo que «hace falta discutir en el país una política de vivienda» sin dejar de reconocer que las UVI serán un instrumento más para los vecinos organizados en cooperativas.
«Tenemos que discutir el acceso al suelo y esperamos apoyo del Estado para nuestro sector, que está constituido por entidades de vivienda pero también de servicios públicos, de trabajo, financieras, de seguros, y por ende puede llevar soluciones integrales a cada territorio.»
Mansilla precisó que en Cooperar hay seis federaciones que nuclean a unas 200 cooperativas de vivienda en distintos puntos del país, que construyeron más de 20 mil hogares en las últimas dos décadas y podrían duplicar esa cifra con terrenos disponibles actualmente.
«No somos los salvadores del déficit habitacional pero si hay un mercado de crédito para la vivienda podemos ser una herramienta válida que los canalice y asegure el acceso a la vivienda de aquellos que lo necesitan.»
Finalmente, señaló que «la vivienda más cara es la que no se tiene» por lo que es necesario «trabajar a favor del 25 por ciento de habitantes que alquila, que mira si la cuota del crédito es equivalente al alquiler», y descartó que la mora sea un inconveniente para el sistema cooperativo.
«El trabajador argentino quiere tener su casa y pagarla. En el caso de la cooperativa Falucho, en Tandil, entre 1000 asociados hay 998 que cumplen, por poner un ejemplo. Nosotros no regalamos la casa a nadie y nadie quiere que se la regalen. Necesitamos condiciones para dar soluciones habitacionales.»
«Saldar el déficit habitacional»
La comisión de Vivienda de Cooperar comenzó su actividad de incidencia en el Congreso con una reunión en el despacho de Cobos, a mediados de mayo, donde le expresaron al senador el interés por contribuir a «saldar el severo déficit de vivienda que adolece nuestro país» a través del «esfuerzo conjunto» del Estado y la sociedad civil.
“Tanto los mutualistas como los cooperativistas hemos estado esperando durante mucho tiempo una ley de estas características y esperamos que se sancione rápidamente», agregó el dirigente Raúl López. Durante la charla, Cobos agradeció el apoyo y resaltó el papel que cumplen las cooperativas de vivienda en todo el país para dar respuesta a la necesidad de un hábitat inclusivo.
Semanas después, los dirigentes sectoriales fueron recibidos por el diputado nacional Horacio Alonso, en su despacho. Además de interiorizarlo sobre las actividades que se vienen realizando desde las cooperativas en todo el ámbito nacional, conversaron acerca de la cuestión habitacional.
El legislador remarcó la falta de visibilidad de las entidades intermedias que contribuyen a reducir el gran déficit a nivel nacional y ofreció el ámbito del Congreso de la Nación Argentina para efectuar una jornada sobre el movimiento cooperativo.
