“En un mundo globalizado y que cada vez se enfoca más hacia la tecnología, sobre todo post pandemia, se necesita tener cooperativas que puedan dar respuesta a esas necesidades”, comenta Nicolás Langiano, integrante de la cooperativa Coodesoft, de Tandil, que a su vez es parte de la Federación Argentina de Cooperativas TIC.
Junto con otros 400 cooperativistas de más de 20 países, participó hace algunas semanas del primer evento de integración global destinado a fortalecer el vínculo de las entidades tecnológicas con el resto del universo cooperativo mundial.
El encuentro Cooding, desarrollado en Bolonia, Italia, fue convocado por la organización europea de cooperativas de producción y trabajo asociado, la cual es parte de la Alianza Cooperativa Internacional.
Precisamente en la órbita de la entidad que agrupa a todas las cooperativas del planeta se viene gestando hace algunos años una red, llamada Patio, de entidades dedicadas a la creación, gestión y distribución de tecnologías.
Muchas de ellas participaron del Cooding. “Fue un encuentro muy fructífero, que nos permitió poner en discusión de vuelta a la tecnología, quiénes la desarrollan y para qué, entendiendo que las cooperativas tecnológicas desarrollan un software o una tecnología en realidad enfocada mucho más hacia el humano y con otras lógicas completamente distintas”, describe Nicolás.
Esto lo hacen “sin perder el foco de la productividad, pero siempre teniendo en cuenta al ser humano como principal eje y así también la comunidad y también al medio ambiente”.
– ¿Cómo está parado el sector cooperativo hoy ante el proceso de revoluciones tecnológicas en marcha?
– Hay una producción de software de muchísima calidad, capaz de competir a cualquier empresa multinacional o transnacional, pero que viene corriendo por detrás por un tema económico principalmente y por diferencias en legislaciones. Hoy se hace imposible que una cooperativa, particularmente en Argentina y en varios países más, sea competitiva con otra empresa cuando tiene limitado su accionar.
– ¿Qué es lo que puede ofrecer este sector en ese escenario?
– En cuanto a la producción en calidad me parece que están iguales y por otro lado, sí hay un déficit muy grande que notamos en algunos países, especialmente en Argentina, de que falta todavía hacer que las cooperativas tengan la capacidad de producir software para potenciar el trabajo de otras cooperativas, especialmente cooperativas de trabajo que hoy por hoy están sin utilizar sistemas pudiendo hacerlo tranquilamente con un poco de inversión de parte del estado.
– ¿Cuáles son los desafíos a futuro?
– Creo que hay que poner a las cooperativas de desarrollo de tecnologías en el eje de la discusión y entender que ya hay lugares donde las cooperativas están desarrollando tecnologías para otras cooperativas, adoptando soluciones de calidad y potenciando sus trabajos.
El presidente de Cooperar y de la ACI, Ariel Guarco, envió un saludo a quienes asistieron al Cooding: «Las cooperativas que pueden desarrollar tecnologías deben intercooperar con aquellas que necesitan adoptarlas desde una perspectiva que respete nuestra Identidad. En ese sentido, para la Alianza Cooperativa Internacional, Cooding es una magnífica experiencia y estoy seguro que este será el puntapié de avances significativos en base a la intercooperación propia de nuestro movimiento cooperativo«.
