«La crisis climática ratifica que las falencias en infraestructura no sólo implican un techo al potencial agropecuario sino que resultan vitales en momentos críticos como los que estamos viviendo en la región», subrayó la Federación de Cooperativas de Corrientes (Fedecoop).
La entidad de segundo grado se solidarizó con las familias damnificadas por las inundaciones que sufren esa provincia, Santa Fe, Chaco y Santiago del Estero y que dejaron como saldo -hasta ahora- más de 7 mil evacuados y enormes pérdidas en las economías locales.
«El panorama es complicado. Son indispensables las acciones interjurisdiccionales coordinadas para evitar y/o limitar las consecuencias nefastas de este tipo de fenómenos. Con la emergencia no es suficiente, aunque es necesario que se aplique lo antes posible», advirtió la Fedecoop.
Al mismo tiempo, la organización cooperativa acusó que «falta planificación, las obras no se ejecutan y la carencia de infraestructura genera al campo daños con altísimos costos. Se necesitan obras hídricas, viales, energéticas y habitacionales; financiación adecuada y un seguro multirriesgo».
En resumen, reclamó medidas excepcionales y urgentes para los productores afectados pero también políticas de fondo, que eviten efectos más dramáticos. Algunas de ellas están planteadas en un proyecto de ley presentado en septiembre por la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro).